martes, 1 de mayo de 2012

Mayo mes de Marìa

Mayo mes de Marìa, para nosotros tambièn mes de las madres.
Despuès de todo no podemos separar las dos celebraciones y desde nuestra niñez esto ha sucedido invariablemente en esta època.
Hoy debemos ser garantes que este conocimiento de Marìa,  que este sentir de su humildad, de su maternidad, de su sacrificio, de su protecciòn , de su intercesiòn podamos nosotros enseñarlo a nuestros hijos, porque todos vivimos alguna vez necesitados de una madre y si nuestra madre como fue en mi caso es para nosotros reflejo de Marìa de Nazareth què gran bendiciòn. Aùn cuando no siempre uno ha sido conciente de ello nuestra Madre ha estado junto a nosotros asì como en esta imagen, protegièndonos, dàndonos su calor, su amor hacièndonos sentir seguros, confiados, sentirnos como parte de ella y si como decìa no siempre somos concientes de esto, què falta nos hace cuando no se le menciona.
Hace unos años tuve la oportunidad de leer un libro que daba varias historias interesantes sobre diversas situaciones duras de la vida, debo aceptar que estaba muy bien escrito y que a media lectura me enterè que era de una denominaciòn no catòlica pero no pude seguir leyendo porque sentì que algo hacìa falta, despues de reflexionar un poco fui conciente que lo que faltaba era Marìa, faltaba ese apoyo que solo ella puede darnos en momentos difìciles, sòlo ella que pasò momentos tan duros viendo a su Hijo cumplir una misiòn de amor y solo ella  que aceptò siempre la Voluntad de Dios y me aceptò a mi y a ti como su hijo puede enseñarnos a ver las situaciones difìciles como oportunidad de vivir el amor de ella y el amor de Jesùs; nos puede enseñar el sentido de nuestra vida caminando hacia donde Dios quiere que lleguemos a su Presencia.
En este mes volvamos a ser niños y a gozar de nuestra Madre, vivamos como pareja de su ejemplo en la familia de Nazareth, la Sagrada Familia y gocèmonos de poder seguir su ejemplo de entrega y amor para con sus hijos para poder asì amar a los nuestros.
¡¡Salve llena de gracia!!

domingo, 18 de marzo de 2012

Y ¿fuiste capaz de hacer ésto por mi?

 Nos urge un cambio, nos urge cambiar para volvernos un poquito más como Vos, estamos en un camino hacia  la Pascua, y no es sólo un cambio de hábitos que necesitamos. Escuchamos palabras que se emplean más en estas fechas: oración, penitencia, arrepentimiento, conversión, abstinencia, ayuno. pero actualmente las voces del mundo son tan fuertes y cuesta tanto volver al silencio, a recogernos para estar en tu presencia. Si, nos cuesta pero es hoy tan necesario y es tan importante y tan satisfactorio, aún el más mínimo cambio que nos haga ser mejor persona, ser mejor cristiano y por supuesto ser un mejor matrimonio. Si has sido capaz de hacer esto, dejar que te claven en una cruz y sufrir una muerte espantosa con un baño de sangre previo, tan cruel como innecesario pues una sola gota de sangre quizá hubiera  bastado para salvar a la humanidad entera; pero no, te entregaste completamente al sacrificio por amor, por amor a mí, con todos mis errores, mis pecados mis lados más oscuros me amaste tanto que me salvaste. Por eso cualquier cambio que nos haga mejores es urgente, danos tu Gracia para que podamos vivir con frutos esta Cuaresma.

sábado, 18 de febrero de 2012

Miércoles de Cenizas..¡¡¡.y vamos de nuevo!!!



El próximo 22 de febrero del año del Señor de 2012 nos vamos a acercar a nuestras iglesias a que se nos imponga la ceniza o sea que celebraremos el Miércoles de Cenizas y con esto iniciamos la Cuaresma, nuestra preparación para la celebración de la Pascua del Señor. 
El Santo Padre nos invita a incrementar nuestra caridad o sea el amor en todo sentido, el amor hacia Dios, el amor a nuestro prójimo. Así que animémonos unos a otros para recorrer este camino de cambio, este camino de conversión, esta transformación en una mejor persona, en un mejor cristiano. Con la ceniza reconocemos humildemente nuestras debilidades, nuestras faltas y vemos con esperanza a un Dios misericordioso que perdonándonos nos enseña a perdonar,  Sintiendo que nos salvó cuando aún éramos pecadores nos muestra la tolerancia, el respeto y la disponibilidad en todo momento para el hermano, principalmente para el que sufre aunque también para el que se encuentra alejado del bien.
Así que ánimo vivamos con Jesús este tiempo fuerte de la Iglesia y que lleguemos a ser más "imagen y semejanza" de un Dios que es Amor.

lunes, 2 de enero de 2012

Nuestra hija mayor se va a trabajar, mientras, seguimos nosotros de vacaciones (último día) le abrí la puerta de la cochera y me despedí de ella, y muchas cosas vienen a mi mente, como el hecho que va creciendo, va saliendo poco a poco al mundo y a todo lo que hay en él, lo bueno, lo malo, lo feo, quisiera poder irme con ella como un guardaespaldas, quisiera quedarme y proteger y gozar al resto de la familia, pero no puedo hacer todo, pero además no es lo que estamos llamados a hacer, sólo podemos gozar nuestros hijos y prepararlos para vivir en este mundo porque es el único que tenemos, sin importar cuánto de lo que hay en él es obra o culpa nuestra preparamos a nuestros hijos para la vida y después confiamos, confiamos que lo que hicimos funcione en su momento. Y así sucede, aunque a veces pasa antes de un mal momento y a veces pasa después, es la experiencia y es el camino que cada uno estará dispuesto a seguir, a vivir; nosotros como padres mostramos uno, el que nos parece mejor, lo mostramos con amor y quisiéramos poder hacer todo lo mejor por ellos  pero al final es la decisión de cada uno lo que trae consecuencias en cada vida, esperamos que sean buenas y que tengan una vida de buenos cristianos, buenos ciudadanos, pero no podemos vivir la vida de cada uno de ellos, los apoyamos, los acompañamos, pero cada uno será dueño de su propia vida, serán sus decisiones y al final, buenas o malas siempre estaremos con ellos, unidos por el amor, pero hay algo que podemos hacer siempre, y es orar por ellos, ponerlos en las manos de Dios con confianza, sabiendo que Él es el Padre y que sabe lo mejor para nosotros y así como hoy veo que no todo lo podemos hacer como padres, pedimos a Dios que los proteja y que haga todo lo que nosotros no logramos hacer. Y así lo hacemos, hoy y siempre por cada uno de nuestros hijos, de nuestras hijas:

             "El Señor te bendiga y te guarde, haga resplandecer su rostro sobre tí y te conceda  su favor.
              Yavé  vuelva hacia ti su rostro y te de la paz" (Num 6, 22,27)